Desde hace mucho tiempo atrás los cajones de música son muy populares en Venezuela, muchas veces las personas prefieren comprar uno de estos cajones junto a un amplificador en vez de invertir en un equipo de sonido de marca que por lo general son costosos y no alcanzan potencias elevadas.
Personalmente pienso que los fabricantes de equipos de sonido para el hogar tienen razón en no hacerlos de mucha potencia ya que el escuchar música a alto volumen dentro de espacios cerrados es peligroso y muy perjudicial para la salud, sin embargo quienes buscan mayor potencia a menudo optan por este tipo de cajones.
De vez en cuando me llegan cajones de este tipo al taller con fallas comunes, por lo que decidí publicar este artículo sobre el tema para describir dichas fallas y la forma de prevenirlas. Lo primero que he de decir es que, los cajones de música que se consiguen en las tiendas ya armados, por lo general son fabricados por personas que no conocen mucho de electrónica o de audio, ni tienen ningún interés de hacer un producto de calidad.
La mayoría son armados con componentes de baja calidad y sin tomar en cuenta los aspectos técnicos que aseguren el correcto funcionamiento del equipo, he aquí las fallas más comunes que he podido ver:
Cables amarrados: es decir, los cables no se pegan con soldadura a los terminales de las cornetas sino que son amarrados cavernícolamente lo que hace que al poco tiempo de comprados los cajones comiencen a fallar.
Tweeter de agudos conectados directamente: Los parlantes de agudos o tweeter nunca deben ser conectados directamente a la señal que viene del amplificador sino que deben pasar por un condensador o filtro que por lo general es de poliéster y cuyo valor puede variar entre 2,2 y 4,7 micro-faradios. Al conectar el tweeter directamente a la señal este puede sonar a poco volumen pero al aumentar el volumen sin duda se quemará, corriéndose también el riesgo de dañar el amplificador usado.
Muchas cornetas conectadas en paralelo: Las cornetas para sonido de casa por lo general tienen una impedancia de 8 ohmios, y los amplificadores están diseñados para trabajar con esta impedancia. Hay amplificadores profesionales que pueden trabajar con impedancias de 4 y hasta de 2 ohm, pero si conectamos muchas cornetas en paralelo la impedancia puede bajar a un valor inferior del que el amplificador puede soportar haciendo que se caliente y se dañe, o en el mejor de los casos, que se active el sistema de protección del amplificador y el equipo deje de sonar. Si se van a usar varias cornetas en un cajón se debe, además de usar un crossover para separar las señales, usar conexiones en serie y paralelo que aseguren que la impedancia no baje demasiado.
Cable muy delgado: Muchas veces para ahorrar dinero en la construcción de los cajones los fabricantes usan cables muy delgados para hacer la interconexión de las cornetas en el interior, sin embargo, aunque estos cables pueden funcionar bien a bajo volumen, a medida que se incremente la potencia aumentando el volumen los cables se comenzarán a recalentar llegando a veces a achicharrarse, y produciendo variaciones en la impedancia que pueden dañar el amplificador.
Otros: como mencioné anteriormente, la mayoría de cajones que se consiguen en las tiendas no son fabricados tomando en cuenta las especificaciones técnicas y aspectos de diseño que influirán no sólo en que produzcan un buen sonido sino también en la durabilidad. Lo que recomiendo es que si alguien se anima a comprar un cajón de este tipo una vez lo adquiera llévelo a un técnico de confianza que lo desarme y le diga si realmente está bien fabricado o por el contrario necesita hacerle alguna modificación para evitar males futuros. Igualmente, quien quiera fabricar su propio cajón, busque asesoría primero para asegurarse que su inversión obtendrá buenos resultados.